¿Y a esto cómo se juega?

Cada LUNES el blog se actualizará con una entrada que expondrá la situación actual de Óscar y se dará a elegir a los lectores entre tres opciones que representarán su futuro inmediato: dos de estas opciones vendrán preestablecidas por la dirección del blog (ego sum) y la tercera quedará abierta para que sea el público quien la sugiera. De vosotros depende que Óscar se convierta en un triunfador en la vida o en un mendigo harapiento, por mencionar solo dos de las infinitas posibilidades. Adelante.

miércoles, 16 de abril de 2008

1x06. El sueño de los peces. Parte III

Óscar abrió la puerta de su casa. Parecía que tanto su padre como su madre habían salido a trabajarya así que subió tranquilamente a vestirse. No recordaba cómo había llegado desde la universidad a casa, pero eso ya era lo de menos. Lo importante es que ya estaba a salvo de miradas.

Ya en su cuarto sacó algo de ropa de los cajones del armario y se vistió. Pensaba que si se daba prisa aún podía llegar a hacer algún examen. Una vez vestido se vio la vuelta y casi se cae de culo del susto.

Sobre su cama había un vaquero.

Un cowboy de los de los westerns, completamente vestido de negro que fumaba un cigarrillo mirándolo pacientemente.

-¿quién... quién es usted?- dijo Óscar retrocediendo.

El pistolero sopló el humo y apagó el cigarrillo sobre la mesita de noche de Óscar. Le miró y dijo seriamente:

-Muchacho, he venido a ayudarte.
-¿A ayudarme? No necesito ayuda.

El pistolero le miró de hito en hito.

-Vaya. Así que pretendes que me crea que no sabes dónde estás.
-Estoy... - dudó Óscar- en mi casa, ¿dónde voy a estar?

El pistolero soltó una carcajada y abrió su abrigo para que sus dos armas relucieran como rayos de sol extraviados.

-Entonces... ¿quieres decirme que no tienes ni idea?

Óscar tuvo de repente un flash de memoria, la frase "estás muerto", la alcantarilla, la tubería en la universidad.

-Estoy... ¿muerto?
-¡No!- rió el pistolero-, aún no al menos. Para eso he venido.
-¿Viene usted a matarme?
-O a darte la vida. La cosa es que te tienes que decidir, estás aquí sin decantarte por un lado o por el otro.
-Pero... los exámenes...
-Todo esto es mentira, Óscar, es falso. Lo estás creando tú porque estás cansado. Pero debes morir ahora o regresar al camino. ¿Qué me dices?

Óscar tenía la cabeza embotada. Todo era extraño y denso, el mismo aire era empalagoso al entrar por la boca.

-¿Qué debo hacer?

El pistolero sonrió. Sacó un arma de su cartuchera y se la acercó a Óscar, ofreciéndole por delante su empuñadura de sándalo. Óscar contempló el arma petrificado. En el cañón había tres letras grabadas. Las mismas que en su pulsera.

-Toma el arma y decide si quieres morir o luchar.

Óscar tragó saliva.

-Si quieres morir apunta a la cabeza y dispara. Si quieres luchar...- dejó ver el otro arma- tendrás que derrotarme. Al amanecer.

Óscar cogió el arma en sus manos.

4 comentarios:

Elem dijo...

ajj lo sabía, sabía que el pistolero andaba cerca jaja.
Las letras son ka-tet jaja pero no me caben tantas!
Joer, como para perderse un día en este blog, menos mal que me pilla en esta semana y no en las pasadas que he estado fuera.

Elem dijo...

Y por supuesto, retar al pistolero. Que no dije na!

†_†Cristina DunkleSeele†_† dijo...

Retar al pistolero siiiiiiiiiiiiiiii!!!
Las letras son MQL...¿Quereis saber que quieren decir? noooooooo, se lo dire al Jefe en secreto jejeje...

Virginia dijo...

Dios.
Me estan picando para que lo cuente, diosito.
Y yo no quiero abrir la boca y decirlo, pero voy a tener que hacerlo...

¿Alguien ha envenenado el abrevadero? xdddddd